Luna llena en Virgo.

Luna llena en el grado 5 de Virgo cerrando un ciclo de los últimos seis meses.

Una amiga con ascendente en Virgo me decía qué se había dado cuenta que a veces nos cuesta soltar ciertos hábitos emocionales, es decir situaciones o hasta costumbres, que nos traen un tipo de emoción conocida pero que no nos hace bien. Sabemos que las lunas llenas nos permiten ver, arroja

r luz de consciencia y verdad, a algo que antes no estaba tan claro y creo que esta información fue el reflejo de eso. Una luna llena en Virgo puede ser quirúrgica en cuanto al tipo de detalle que podemos acceder que antes se escapaba de nuestro radar de entendimiento. Eso si, hay mucho bullicio, crítica y emociones dando vueltas y para poder asimilar, necesitamos del tiempo para sentir y procesar.

Se hacen evidentes circunstancias que necesitan ser concluidas, cerradas, purgadas o al menos ajustadas, para poder reducir la complejidad en nuestra vida y traer soluciones tanto en lo practico como en lo emocional. No tengo dudas que esto se va a trasladar a situaciones concretas y mundanas como tener que arreglar algo de la casa o atender nuestra salud, pero en lo profundo y sensible, algo esta en ebullición para que tomemos nota de eso. Un gran proceso de síntesis emocional se nos presenta, aunque ahora veamos cierto caos.

El sol en piscis ilumina la luna llenándose completamente en Virgo, quizá primero nos veremos jalados hacia los extremos para aprender a ir por el camino del medio entre la ilusión y la realidad, la fantasía y lo concreto.

Saturno en Piscis estuvo en conjunción a la luna llena y no me sorprende si la crítica, el juicio, tanto con nosotros y el mundo, puede estar elevado en volumen. Mercurio también influenciado por Saturno, me indica que la mente puede volverse una tormenta de rigidez así que estar atentos puede ayudar a traer menos dureza con lo que estemos pasando.

Puede ser que haya impulsos de estar productivos y que aparezca la culpa si no hacemos algo perfecto, si eso sucede, verlo ya lo transforma. Lo mismo si aparece la obsesión por si no podemos inmediatamente erradicar situaciones o emociones que nos aparecen equivocadas, erróneas. Si algo me recuerda la luna llena en Virgo es que todas las emociones tienen su lugar, su espacio y poder permitir eso, las ordena, aunque no nos gusten algo nos vienen a mostrar y eso es sagrado por mas efímeras que algunas sean.

Es una lunación intensa y venimos de la activación de Quiron a los nodos de la luna: las heridas se están iluminando también, gatillando para mostrarnos que tanto seguimos bajo el hechizo del dolor sin ver que se esconde detrás del mismo. Esta luna llena es desafiante pero reveladora de cómo lidiamos con nuestras emociones y por mostrar situaciones que se agotaron. Puede también proponer liberación especialmente después de que hoy domingo, la luna dibujó un trino a Urano divisando nuevos destinos y caminos. Tal vez estaremos oscilando entre el miedo, la crítica, el control y la necesidad de romper los límites de nuestra mente, del muro de nuestra percepción, de nuestra idea de cómo algo tiene que ser.

Para cerrar algo que aprendí (Y no por las buenas al principio), es que las prácticas que nos hacen bien, por más pequeñas e ínfimas que parezcan, hacen la diferencia a cómo cuidarnos incluso cuando algo nos está doliendo. Eso para mi es trazar un camino al corazó y acceder a una paz que siempre está. Virgo sin Piscis no existe y por más que nos tiente más ir hacia el cielo, sino cultivó lo pequeño como voy a poder alojar lo infinito?.

Virgo es la receta para presenciar la magia de Piscis. Por eso creo que si bien esta luna llena puede dejar en evidencia las cosas que no están a nuestro servicio y las que ya no son funcionales para nuestra evolución, también nos muestra dónde estamos y que podemos hacer algo respecto. Saturno me enseñó que hacerme cargo de mi misma, me da libertad, aunque primero patalee y me queje. Esta luna llena puede traer mucho la queja y no hay nada malo en eso, me enseña lo que me frustra, lo que me irrita para que pueda tomar decisiones. Luego de cursar cada ola emocional, puedo encargarme de mi bienestar, de mi camino, de mi servicio, del rol que me toca hoy experimentar.

Sabia luna llena, que todo lo que se te muestre esté a tu servicio para estar más cerca de quien verdaderamente sos. Que cada crítica y juicio te muestre el lado de la compasión y aceptación. Que todo lo que ya no te reciba te permita descubrir donde genuinamente tu alma anhela estar.

Con amor, Ailu.

Hanuman el servidor de Ram, decía: Cuando no se quien soy, te sirvo, cuando se quien soy, soy vos.